Entrevista con D. Javier Nadal Airiño Director General de Telecomunicaciones
Rafael Fernandez Calvo
Entrevista con D. Javier Nadal Airiño

Entrevista con D. Javier Nadal Airiño

Director General de Telecomunicaciones

Director General de Telecomunicaciones

Las llamadas "autopistas de datos" o "autopistas de la información" son consideradas por muchos como uno de los principales motores del cambio económico y social para los próximos años (veáse la Agenda for Action on the NIINational Information Infraestructurepromovida por el Vicepresidente de los Estados Unidos o el Libro Blanco sobre Crecimiento, Competitividad y Empleo elaborado a instancias del Presidente de la Comisión Europea, Jacques Delors).


Desde una perspectiva tecnológica de carácter general, es decir, no limitada al caso español, le parece que en esta cuestión la hipérbole supera a la realidad o se trata por el contrario de una perspectiva creíble y realizable?

No sé si la realidad va a superar o no a las previsiones. Lo que sí puedo decir es que no me cabe ninguna duda de que estamos ante una actividad que en los próximos años se va a desarrollar de una manera espectacular, que va a generar muchas posibilidades de negocio y que en todo caso va a movilizar sin duda ninguna la economía en los próximos 4 o 5 años.


Existen numerosas definiciones, no siempre concordantes, sobre lo que es o debería ser una autopista de datos, definiciones que implican opciones muy concretas sobre su diseño, sus actores, sus componentes, sus aplicaciones... ¿ con qué definición están Vds. trabajando en el Mente en el que su Dirección General está encuadrada?

Es cierto que la definición del concepto de autopista de la información es una definición ambigua, un concepto amplio que no está suficientemente clarificado. Quizás ahí está una de las ventajas de su existencia. Yo voy a definir no tanto lo que es como lo que no es. Desde mi punto de vista, la autopista de la información no es una nueva infraestructura que se sume a las existentes. Uno podría pensar al hablar de autopistas de la información que lo mismo que una autopista es una carretera que normalmente se hace sin destruir las carreteras existentes, también aquí la autopista de la información sería una nueva infraestructura que se suma a las existentes. Pues bien, el concepto americanoque es el que se ha impuesto de autopista de la informaciónno es ese, no es una autopista que se sume a las existentes, sino que es una red de redes. ¿ Qué quiere decir una red de redes? Quiere decir que existen ya en este momento, en las sociedades avanzadas, un número amplio de redes: Existe la red telefónica; existen redes de televisión por cable; existen redes privadas de diversas características.

Pues bien, de lo que se trata con el concepto de autopista de la información es que todas estas redes se interconecten entre sí. Por lo tanto, hay que trabajar en primer lugar en los interfaces, en la facilidad necesaria para que todas esas redes se interconecten. ¿ Para qué queremos que se interconecten? Queremos que se interconecten para dar más facilidades a fin de que la cantidad de información que se encuentra en distintos soportes en una multitud de lugares en la sociedad (información que no siempre está accesible para todo el mundo que la podría utilizar) circule a través de esa red de redes y llegue a muchos más usuarios de los que actualmente llega. Eso quiere decir también que, además de interconectarse esas redes, éstas necesitan, o van a necesitar, tener una capacidad mayor de transmitir información porque a las informaciones que hasta ahora se venían transmitiendo, como puede ser la voz o datos, hay que sumar imágenes, gráficos, una serie de nuevas posibilidades multimedia que requieren unas capacidades de ancho de banda que las actuales redes, muy posiblemente, no les van a ofrecer. Por lo tanto, aunque no estemos hablando de construir una nueva infraestructura, tampoco podemos olvidar que las redes existentes van a necesitar renovaciones para estar a la altura de las necesidades actuales. Por ejemplo, necesitaremos sustituir el cobre del bucle de abonado por fibra óptica; necesitaremos sustituir las actuales redes arborescentes por otras redes en estrella que permitan la interactividad, etc...


Se halla España bien situada para coger este tren, desde el punto de vista tecnológico, industrial y financiero, o estamos destinados a instalarnos en el vagón de cola de los países desarrollados, es decir, en qué medida nuestras Administraciones Públicas, nuestro operador público (Telefónica) y el sector privado de las telecomunicaciones (y los medios de comunicación privados y públicos) de nuestro país están en condiciones de competir en este campo?

Sinceramente creo que España no está mal situada, pero también es verdad que los distintos agentes que tienen que jugar en este intersector no están todos al mismo nivel de desarrollo, lo cual por otra parte es lógico. Por ejemplo, Telefónica, nuestro operador público y una de nuestras principales empresas, creo que está en una situación bastante saludable y bastante buena, porque, si bien venía arrastrando históricamente una serie de problemas que lastraban su porvenir, creo que en los últimos años esos problemas han sido solucionados y así, por ejemplo, nos encontramos con que ya no es un problema pensar en la cobertura integral del servicio telefónico; ya no es un problema la calidad del servicio ni la lista de espera; ya no es un problema la falta de digitalización. Telefónica está en unos porcentajes de digitalización razonables, por lo tanto creo que desde el punto de vista del operador ha superado los principales problemas que tenía en el pasado y está en un momento idóneo de arranque. Prueba de ello son además las alianzas internacionales en las que está interviniendo, precisamente para no perder el tren del futuro. La Administración creo que está haciendo el papel que le corresponde para abrir los mercados y poner en marcha un programa razonable de liberalización, razonable en objetivos y en calendario, y está haciendo otra cosa muy importante: Poner en pie una serie de programas de investigación y desarrollo, que de cara al futuro de estas nuevas aplicaciones, de estas autopistas de la información, van a ser de importancia fundamental. Me refiero, por ejemplo, al plan de banda ancha, conocido como PLANBA, que ya desde el año 92 se viene desarrollando y que está a punto casi de terminar su andadura, con un considerable resultado positivo; me refiero, por ejemplo, a otros programas como el plan CHAT, que va a iniciarse dentro de poco y que va a movilizar a la industria. En definitiva, creo que la Administración está poniendo en pie las herramientas necesarias.

Respecto a la industria, creo que podemos sentirnos orgullosos de su calidad. Tenemos una industria importante, aunque yo diría también que se echa en falta un cierto liderazgo. En cuanto a los medios de comunicación, diría que de todas las piezas del puzzle que tienen que jugar en este sector son tal vez el elemento con mayores problemas en este momento. Finalmente, respecto al sector financiero, creo que puede jugar un papel importante y que está en disposición de hacerlo, prueba de ello es que cualquier nuevo programa de privatización o liberalización que se pone en pie en el sector de las telecomunicaciones recibe enseguida multitud de ofertas desde el sector financiero. Ahí tenemos el próximo concurso de GSM (telefonía móvil digital), para el que hay cinco candidatos, entre los cuales están prácticamente todos los grupos financieros importantes del país.


¿ Cuáles son los planes del Ministerio de Obras Públicas para la implantación en España de las autopistas de datos? ¿ Existe algún órgano (de carácter interministerial o no) en la Administración española similar al Information Infraestructure Task Force (IITF), grupo de trabajo creado por el Gobierno norteamericano para impulsar el desarrollo de la NII? ¿ Está prevista la participación en su definición y diseño de entidades de la sociedad civil tales como asociaciones y colegios profesionales, empresarios, sindicatos, usuarios, etc.?

Son tres preguntas en una que yo creo que tienen una respuesta fácil. Este Ministerio tiene un instrumento en marcha y tiene un organismo en marcha también; Tiene un organismo que es el Consejo Asesor de Telecomunicaciones, en el que participan asociaciones, colegios profesionales, empresarios, sindicatos, usuarios, todo el mundo que tiene algo que decir y que hacer en el sector de las telecomunicaciones, y tiene un instrumento que es el Plan Nacional de Telecomunicaciones (P.N.T.), cuya primera versión se hizo en 1991. Llevamos ya tres años largos de ejecución del P.N.T. y estamos en el cuarto año, en el cual existe el compromiso de hacer una nueva versión de este P.N.T., que es un documento de planificación a largo plazo. Un documento de estas características que va a nacer el año 1994, sólo puede entenderse si aborda este principio o esta idea de la que estamos hablando de las autopistas de la información. El Consejo Asesor informará en su momento y colaborará en la elaboración de este plan.


El concepto de "servicio universal" es uno de los principios esenciales que están guiando el diseño de la NII en los Estados Unidos con el fin de no acentuar las diferencias sociales en la llamada Sociedad de la Información. ¿ Podría asegurarse en nuestro país el acceso universal y no discriminatorio a los servicios básicos de las autopistas de datos tal y como se asegura hoy en los servicios telefónicos?

El concepto de servicio universal es un concepto dinámico. Hoy este concepto en España tiene dos partes. Por un lado, el servicio universal referido al servicio telefónico, que en este momento está definido desde dos puntos de vista: Primero, que el servicio telefónico debe de ser automático y debe de estar accesible al 100% del territorio. Esto se conseguirá el año 96. Además, el servicio telefónico debe ser complementado con la tarificación detallada gratuita para todos los abonados. Esto será conseguido el año 97, por lo tanto, por lo que ser refiere al servicio telefónico, el concepto actual de servicio universal es el que acabo de definir.

El otro servicio de telecomunicaciones que está contemplado dentro del concepto del servicio universal, hoy por hoy, es la televisión. ¿ En qué consiste esta definición?: En garantizar la cobertura universal tanto de la televisión pública como de la televisión privada al 100% del territorio. Para la televisión pública éste es un objetivo prácticamente conseguido. Para la televisión privada se acaba de poner en marcha el programa de inversiones necesario a fin de que esto pueda conseguirse en los próximos dos o tres años. Por lo tanto, el concepto lo tenemos definido hasta ahí. ¿ Es esto suficiente?. Evidentemente no, porque, como decía al principio, el concepto de servicio universal es un concepto dinámico. A partir de este momento, nos tenemos que plantear (y así lo va a hacer el P.N.T.) la definición de qué es el servicio universal o qué va a ser el concepto de servicio universal para los próximos años. Esa definición evidentemente se tiene que referir a la necesidad de garantizar el acceso a toda la información disponible a través de esta red de redes que en el futuro se organice para que todos los ciudadanos españoles tengan acceso a esa información, para que no haya una fractura social entre aquellos que pueden tener acceso a esta información y aquellos que no puedan tener acceso.


La protección de la intimidad y los mecanismos criptográficos para asegurarla están causando un agudo debate en los EE.UU. entre los que se inclinan más por la seguridad nacional y los que prefieren restringir el acceso a la red de los órganos de seguridad y orden público, para preservar la privacidad de los ciudadanos (veáse el caso del chip Clipper tratado en este mismo número de Novática). ¿ Tiene la Administración española alguna postura definida en esta cuestión?

Creo que la Administración española tiene muy clara esta cuestión. La obligación de la Administración es hacer cumplir la Constitución en un doble sentido: Garantizar la privacidad y el secreto de las comunicaciones y posibilitar la actuación del Poder Judicial. Para ello hay que introducir todas las tecnologías disponibles y en esto nos ayudarán muchos las nuevas tecnologías digitales. Al mismo tiempo, hay que garantizar que el Poder Judicial pueda actuar convenientemente cuando así lo determine y por lo tanto habrá que ofrecerle también todas las posibilidades que da la tecnología, para que, ante un mandamiento judicial, pueda actuar convenientemente.


¿ Qué servicios de telecomunicaciones de los hoy existentes en nuestro país podrían considerarse como componentes de una incipiente autopista de datos? ¿ Qué aplicaciones de la autopista de datos ve más factibles a medio plazo en España (teletrabajo, video a la carta, correo electrónico, ...)?

Yo creo que todos los servicios actuales podrán circular por esa hipotética autopista del futuro, porque al final estamos hablando de una suma de servicios, hablamos de multimedia, y en el fondo multimedia son diversos servicios unidos en una misma aplicación. En concreto, de éstas que se me preguntan como más factibles a corto plazo, tendría que decir que el correo electrónico no es que sea factible a medio plazo, es que es factible y es real hoy, y creo que hay ya un número importantísimo de usuarios del correo electrónico en España y que es una aplicación ampliamente utilizada por muchas personas hoy en día.

Evidentemente, el video a la carta es una posibilidad a corto plazo pero no inmediata, porque no tenemos televisión por cable, aunque, como es bien sabido, en cuestión de pocos meses habrá una legislación aprobada y por lo tanto espero que haya un desarrollo importante de las redes de televisión por cable, que, por cierto, será unos de los elementos fundamentales para construir esta red de redes de la que estamos hablando. Por lo tanto, el video a la carta es algo que estará disponible en un plazo relativamente corto.

Respecto al teletrabajo, yo diría que es una nueva posibilidad para la cual las herramientas técnicas están ya disponibles. Nosotros hemos hecho ya experiencias a través del programa STAR, pero todavía está por ver que la sociedad asuma realmente esta nueva forma de trabajar. Los elementos técnicos están ya ahí y yo diría que lo que hace falta es más una respuesta social que una oferta técnica.

Aparte de estas, hay otras muchas aplicaciones que sin duda ahora no se nos ocurre ni plantear porque nuestra imaginación es limitada. Afortunadamente la tecnología nos desbordará o nos ayudará a que nuestra imaginación se desborde.


¿ Qué papel tendrá en España la Administración Pública en la promoción e implantación de la autopista de datos? ¿ La dejará en manos de la inversión privada, como ha señalado muy recientemente una alta responsable de su Ministerio, en el marco de la desregulación del sector de las telecomunicaciones?

Es España la inversión en telecomunicaciones siempre ha sido realizada por el sector privado, lo que ocurre que hasta ahora ha sido una inversión privada realizada prácticamente por un solo agente: Telefónica. A partir de ahora lo que va a ocurrir es que la inversión seguirá siendo privada, pero será realizada por diferentes agentes, todos aquellos que entren en el sector de las telecomunicaciones. ¿ Quiere esto decir que la Administración se desentiende? Evidentemente no, primero porque, como he dicho antes, el programa de actuación de la Administración estará incluido en un P.N.T. cuyo principal objetivo será hacer que la inversión privada movilice el sector de las telecomunicaciones y estar vigilante en que esta inversión además se oriente hacia los aspectos o los planteamientos de servicio público de los que hemos hablado anteriormente. Si estos aspectos de servicio público no son suficientemente resueltos por el sector privado, la Administración planteará los instrumentos necesarios para corregirlos. Por otra parte, la Administración tendrá un papel muy importante en la promoción de nuevas actividades y en la promoción de la investigación al igual que está haciendo hasta este momento.


¿ Qué proyectos existen en este campo en el ámbito nacional y europeo y qué inversiones públicas y privadas están previstas en los próximo años?

Puede parecer una paradoja, pero estamos hablando de grandes proyectos o de grandes palabras como autopista de la información, y en cambio no se corresponden estas grandes palabras, en ningún país europeo ni americano, con un gran proyecto o programa nacional que abarque todas estas iniciativas. En realidad, lo que está haciendo todo el mundo, tanto en Europa como en América, tanto a nivel europeo como a nivel de cada Estado, es promover la inversión privada para desarrollar estos nuevos servicios y así, por ejemplo, nos encontramos en España que basta leer los periódicos para ver que algunos auguran que la televisión por cable va a movilizar en España inversiones del orden de 365.000 millones de pesetas. Tenemos por otra parte que Telefónica está invirtiendo todos los años en modernizar su red no menos de 300.000 millones de pesetas, es decir, estamos hablando de unas cantidades de inversión a las que, si sumamos las cantidades mucho más reducidas pero mucho mas numerosas de los proyectos que los grandes usuarios están poniendo en pie en materia de telecomunicaciones, obtendríamos unas cifras que son absolutamente impresionantes. No obstante, tampoco hay que pensar que las Administraciones Públicas hayan abandonado totalmente, ni mucho menos, el acometer proyectos o programas un poco más globales y en este sentido yo espero que de los desarrollos del Libro Blanco de Delors y del informe del grupo Bangemann, acaben generándose una serie de proyectos, que, sin tener la pretensión de ser proyectos europeos grandilocuentes, van a tener en cambio la gran virtualidad de estar orientados a nuevas aplicaciones, de ser proyectos de demostración y proyectos movilizadores de nuevas actuaciones, de los que en el futuro se pueden derivar nuevas utilizaciones de las infraestructuras o de las autopistas de la información.


Tanto Delors como Gore señalan que las autopistas de datos generarán numerosos puestos de trabajos de alta calificación en diferentes sectores económicos. ¿ Está cuantificada en España la posible creación de empleo por este concepto?

Yo diría que ni está cuantificada en España, ni en América ni en ningún sitio. Se habla de cifras pero se trata de cifras que son un poco las cuentas del Gran Capitán. No obstante, es evidente que, en el futuro, se van a crear nuevos puestos de trabajo, nuevos servicios y por lo tanto, nuevas actividades ligadas al sector de las telecomunicaciones y no estamos todavía muy seguros de cómo van a ser. Por ello, porque tenemos esta preocupación, dentro de los trabajos del P.N.T. también hemos iniciado un análisis prospectivo de lo que pueda ocurrir en España. Es un poco arriesgado, pero es evidente que es un trabajo que hay que hacer y todavía no puedo ofrecer cuantificaciones, lo que sí puedo decir es que no hay duda de que va a ser cada vez mas difícil detectar todas las actividades de telecomunicaciones que estén operando en la sociedad, porque los servicios de telecomunicaciones, las actividades de telecomunicaciones, se están convirtiendo cada vez más en una actividad horizontal que entra por los intersticios de todos los sectores económicos y que en todos los sectores económicos va a haber y hay ya cada vez más puestos de trabajo que son de telecomunicaciones y que están integrados en otras actividades. Por lo tanto va a ser muy difícil evaluarlo; ahí están esas cifras de la Comunidad Europea, que prevén que dentro de diez o quince años el 60% de los puestos de trabajo van a estar relacionados con las tecnologías de la información. Si eso es así, a ver cómo hacemos para distinguir o para estimar el crecimiento. Ese crecimiento va a ser debido a que el sector de telecomunicaciones crece o más bien va a ser debido a que los puestos de trabajo de otros sectores cambian de forma de ser, por ejemplo hace unos años todos los administrativos trabajaban con una máquina de escribir, hoy trabajan con un ordenador y su puesto está relacionado con las tecnologías de la información. Bien, pues si el cambio va a ser tan drástico pronto va a ser imposible determinar cuantos puestos de trabajo se generan, porque tendremos que decir que son todos.


Las políticas tarifarias son esenciales para asegurar la vitalidad de las autopistas de datos. ¿ Es la actual estructura tarifaria española la más adecuada para que ésta nazca y crezca?

Lo que yo puedo decir es que la actual estructura tarifaria no es la más adecuada para que el sector de las tecnologías de la información se desarrolle en un marco de competencia. Es ya bien conocido el hecho de que las tarifas de telecomunicaciones, sobre todo las tarifas telefónicas y de alquiler de circuitos, arrastran una serie de condicionantes históricos entre los que ha estado fundamentalmente la subvención de las llamadas urbanas a través de encarecer las llamadas interurbanas. En un sistema de competencia eso es inviable y por lo tanto este sistema va a ser modificado radicalmente en los próximos 2 o 3 años. Al decir que va a ser modificado radicalmente, quiero decir que se producirá una subida de las tarifas urbanas y una reducción de las tarifas interurbanas. Ese es el esquema más próximo a los costes del servicio, por lo tanto, supongo que también será el esquema que más favorezca el desarrollo de las telecomunicaciones. Al fin y al cabo las telecomunicaciones lo que hacen es reducir el efecto distancia entre los comunicantes, por lo tanto me parece bastante justo que rebajemos el coste de aquellos servicios que van a facilitar más esa reducción del efecto distancia y bien está que se reduzcan las llamadas interurbanas internacionales si eso además permite una mayor competencia.


¿ Serían necesarios cambios legislativos en España, por ejemplo en la LOT (Ley de Ordenación de las Telecomunicaciones), para que las autopistas de datos fueran una realidad en nuestro país?

Creo que es necesario no tanto cambios legislativos como complementar la legislación existente. Es decir, hoy tenemos una legislación bastante coherente, que cubre prácticamente todos los sectores, salvo uno, que es la televisión por cable, y éste tiene que ser cubierto y lo va a ser dentro de poco. Con eso tendremos prácticamente desarrollados todos los elementos necesarios para estas llamadas autopistas de datos.

Yo creo que no es necesario cambiar la LOT. La LOT es un instrumento legal muy flexible que nos está permitiendo cambiar prácticamente todos los servicios del carácter de monopolio al carácter de competencia, salvo el servicio telefónico, que la LOT define como servicio final. Cuando en el año 98 haya que producir la liberalización del servicio telefónico, bastará en ese momento con que se modifique el artículo en el cual se define el servicio telefónico como servicio final y que en ese mismo artículo se diga que el servicio telefónico pasa a ser un servicio de valor añadido. Por lo tanto yo creo que lo importante en este momento es cubrir los huecos existentes (insisto en la televisión por cable) y en el futuro modificar ese artículo para hacer que la telefonía vocal pase a tener la consideración de servicio en competencia. Y en todo caso, enlazando con todo lo anterior y ya para terminar, me gustaría aprovechar la ocasión de haber tenido esta interesante entrevista con la revista NOVATICA para saludar a sus lectores tradicionales, que son de un sector profesional muy afín al mío y desde luego creo que el sector profesional con más futuro en los próximos años, pues la convergencia entre lo audiovisual, la informática y las telecomunicaciones va a ser no solo una realidad sino que seguramente la actividad que surja de esa convergencia va a ser un todo indistinguible.