habla de ATI 1.- Cargo y organización en la que trabajas:

Prejubilada después de casi 35 años de trabajo en una multinacional del sector TIC. Ahora colaboro en varias asociaciones de todo tipo.

2.- Méritos destacables:

Inquieta y trabajadora.


3.- ¿Qué es ATI para ti y por qué recomendarías ser socio de ATI?

ATI es un sitio donde encontré amigos y donde los sigo encontrando.

Más allá del terreno profesional, lo más importante para mí de ATI son las personas. Pero, obviamente, hay más:

ATI me proporcionó en su momento una visión más amplia del mundo de la informática que la que me proporcionaba mi trabajo, pese a desarrollar mi tarea en una empresa de primerísimo orden.

Novática fue, y sigue siendo, todo un referente para acceder a todo tipo de conocimientos. Los informáticos solemos estar superespecializados, y por ello se hacen necesarias este tipo de publicaciones más generales.

Con ATI hice algún curso, pero, sobre todo, tuve la oportunidad de asistir a conferencias y seminarios, de actualidad y gratuitos. También recuerdo algunas actuaciones dentro de los grupos de trabajo, especialmente cuando Internet arrancaba, que me sirvieron de mucho.

Hoy, aunque esté prácticamente fuera del mundo laboral, me gusta asistir a este tipo de eventos, si tengo oportunidad. El mundo de la informática me sigue interesando y ATI es un buen marco para no olvidarse del todo de los bits.

En ATI también tuve la oportunidad de mantener contacto con el mundo académico, muy importante para los que desarrollamos nuestra labor dentro de la empresa privada, ya que se acrecienta el sentido universal que los profesionales no podemos perder nunca.

Puede resultar algo más frívolo o mundano, pero gracias a ATI conocí en persona a gente tan interesante, y no solo por sus conocimientos, como Vinton Cerf, uno de los padres de Internet. Puede parecer una nimiedad también, pero en otro tiempo tener una dirección personal de correo electrónico del dominio ati.es supuso para mí un " signo de distinción ", algo que daba un cierto prestigio y seriedad a mis otras actividades.

Aunque por razones prácticas, hoy día utilice otras cuentas más comerciales y populares, sigo utilizando este punto de entrada en mis tarjetas de visita. La sigla ATI me ha abierto casi tantas puertas como la empresa para la que trabajé.

"Pertenecer a una asociación profesional da calidad de vida", le oí a un amigo, también socio de ATI, y yo sigo haciendo mías sus palabras.

Con los colegas se siente uno siempre más acompañado y nunca se sabe lo que se puede necesitar. Siempre que he necesitado algo, por tonto que pareciera, he tenido a alguien de ATI dispuesto a echarme una mano.

No voy a dar nombres, pero vuelvo al principio: lo más importante de ATI son los amigos que encuentras aquí.

Si dudas, no lo dudes. ¡Ven! ¡Apúntate!... o por lo menos prueba.

María del Carmen Ugarte García


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