Esta sección cronológicamente empieza con la aparición de las primeras titulaciones oficiales de Informática, las del Instituto de Informática de Madrid y acaba con la "transición" a la democracia. Se desglosa en varias subsecciones.

El Instituto de Informática de Madrid otorgaba 5 titulaciones, una para cada año de la carrera (más otras 2 ). Ofreció la posibilidad a los informáticos que ya las estuviesen "ejerciendo" y tuviesen además unos estudios oficiales de un nivel equivalente de adquirir dichos títulos mediante un examen único.
Ello excluía a los numerosos empleados, reconvertidos en informáticos por los "fabricantes" que vendían los ordenadores, pues un gran número tenían estudios con una titulación oficial inferior a la exigida para obtener el título correspondiente al trabajo que realizaban.
Además cundió entre ellos la intranquilidad pues se entendió que estas titulaciones pretendían ser las únicas que facultaban para "ejercer" la profesión al utilizar un léxico que posteriormente fue heredado por los llamados Colegios Informáticos "excluyentes".

Arrancando con estos hechos, se abre una subsección para recoger documentos, llamada

"Los informáticos no fueron una excepción durante el final de la dictadura"

que puede mostrar a los historiadores otro ejemplo de lo amplio que fue el fenómeno, en los últimos años de la dictadura, por el que cualquier Colegio Profesional, asociación de vecinos o cultural se convertía en plataforma de protesta contra las disposiciones del régimen.

ATI, sin dejar de ser una asociación abierta y democrática, se libró del problema y tensiones que creaba el que estas actuaciones no siempre concitaban la unanimidad interna. La prensa recogía y el lector seguía con interés los enfrentamientos en el seno de Colegios Profesionales y asociaciones, plasmados en la votación de resoluciones o choques electorales entre dos candidaturas, una que, se llamase como se llamase, era vista como la "democrática" y otra que aunque solía llamarse "profesional" era vista como la simpatizante del régimen.

La solución que encontró ATI para evitar estos enfrentamientos internos fue el apoyar que socios suyos creasen una asociación (ANSAPI) en el seno de los sindicatos verticales oficiales que fue la que prácticamente monopolizó las cuestiones que enfrentaban de forma activa a los informáticos y al poder establecido. ATI siempre les dio facilidades logísticas e incluso una sección fija en Novática.

Finalmente otras dos subsecciones de esta sección sirven respectivamente para contener documentos que ilustran sobre la actividad de ATI durante el mismo periodo y publicaciones regulares de ATI que fueron un aliciente en la creación de Novática.

- La actividad de ATI
- Antecedentes de Novática